En compañía de sus familiares y profesores jefes, las estudiantes de los terceros medios A, B, C, D, y E, compartieron un momento de profundo significado espiritual en el que dan de forma colectiva un largo paso hacia la vida adulta.
El evangelio hizo a la asamblea meditar sobre la regla de oro: “Todo cuanto queráis que os hagan los hombres, así también haced vosotros con ellos, porque esta es la ley y los profetas” (Mt 7:12), momento tras el cual, las estudiantes de los 5 cursos del nivel, abandonaron este lugar de oración de forma de prepararse para ser envestidas en esta eucaristía.
El sacerdote hizo uso de experiencias personales para ilustrar un bello mensaje sobre la importancia de vivir sus carreras como personas integrales, más allá del propio traje, sino a través de lo que sus trajes representan.
Con ayuda de nuestra rectora, Wilhelmine Castro, el Padre Andrés Moro realizó el acto de la Aspersión sobre nuestras estudiantes, de manera de poner sobre ellas y sus actos dentro de lo profesional, la bendición de Dios. Es a través de este acto que las jóvenes se comprometen a vivir sus vidas profesionales con un espíritu de servicio que resuene en la mejora de sus familias y el bien general de nuestra sociedad.