¿Cuál fue su primera impresión al llegar?

Siento que fue una doble impresión. Con muchos sentimientos encontrados ya que yo estudié aquí, lo que me hace sentir orgullosa, pero al mismo tiempo un cierto temor al saberme enfrentada con niñas grandes que están en búsqueda de su identidad, te enjuician y encasillan.

¿Cuál son sus expectativas de los cursos que tendrá a cargo?

Espero que mis estudiantes sean participativas y protagonistas en el desarrollo de las clases. También me gustaría que fueran entretenidas y que me ayuden a mantener un ambiente de respeto dentro de la sala.

¿Se acostumbra al ambiente?

Si. Hasta el momento, está todo fluyendo. Pero me costó acostumbrarme a los términos de la educación media.

¿Qué le hizo tomar la decisión de llegar a este liceo?

Bueno, pues la motivación por enseñar en el liceo donde estudié. También la oportunidad de contribuir en cambiar el perfil de la técnico en párvulo según es percibida por la gente hoy. Por último, fue muy motivador para mi poder trabajar con estudiantes sordas. Además, estoy determinada a aprender lenguaje de señas.

¿Qué visión le proporciona haber sido estudiante del liceo en el que ahora se desempeña?

Siento que el colegio me ha entregado mucho y yo quiero entregar a mis alumnas lo mismo. Mis estudiantes y yo debemos trabajar en este colegio con valoración y validación de todo lo entregado por él.

Por Michelle Fuentes

Crédito Fotográfico: Josefa Bock